La Pascua es uno de los acontecimientos más importantes del año para los franceses. Es una fiesta celebrada por todo el mundo, sea cual sea la edad, que cuenta con numerosos símbolos representativos y tradiciones que a día de hoy se conservan.

Las campañas voladoras, o cloches volantes, es una tradición de lo más arraigada en Francia que, sobre todo, celebran los niños. En distintos países del mundo, es tradición que en Pascua los huevos de chocolate y los dulces son repartidos por el tan conocido conejo de pascua. Sin embargo, en Francia, los chocolates los reparten las campanas voladoras.

Esta tradición trata de explicar que desde el Jueves Santo las campanas de todas las iglesias de Francia dejan de sonar, a pesar de ser muy ruidosas a lo largo del año. ¿Por qué iban a dejar de sonar? Porque según la tradición católica francesa, el Jueves Santo las campanas vuelan hasta Italia, concretamente hacia el Vaticano, para recordar la muerte de Jesús y ser bendecidas por el Papa antes de regresar a Francia.

El Domingo de Resurrección las campanas han vuelto y se escuchan de nuevo en las iglesias.

La búsqueda de los huevos de Pascua se celebra el Lunes de Pascua, una vez han regresado las campanas. Esta tradición que mantienen tanto niños como familias consiste en esconder huevos de Pascua, generalmente de chocolate, en jardines, parques y plazas públicas, para que los niños los encuentren.

En algunos lugares, también se organizan concursos para ver quién encuentra más huevos. Esta tradición es muy popular en Francia y, a menudo, es una actividad que se realiza en familia.

Francia es un país en el que se tiene como tradición de pascua consumir cordero. Esta tradición tiene sus orígenes en la religión cristiana, el animal está asociado a la Pascua, porque representa el sacrificio de Jesús en la cruz y su resurrección. Además, el cordero es un símbolo de inocencia y pureza, lo que refleja la idea de la renovación espiritual y la purificación durante la temporada de Pascua.

Dependiendo de la región de Francia, el cordero pascual se prepara de distintas formas. En algunas zonas se asa al horno, mientras que en otras se cocina a fuego lento con verduras y hierbas.

La tortilla gigante, llamada en francés omelette pascale, es una tradición única en el pueblo de Bessières, en el suroeste de Francia. El Lunes de Pascua, se cocina una tortilla gigante para, aproximadamente, los 10.000 habitantes con los que cuenta esta población, para la que se deben utilizar 15.000 huevos y una sartén de cuatro metros. Además, entre 40 y 50 cocineros se encargan de hacerla.

Esta curiosa tradición se remonta a la época de Napoleón Bonaparte, cuando, durante su visita a la zona, se comió una tortilla francesa, y le gustó tanto que ordenó preparar una gigante para que todo su ejército pudiese disfrutarla también.

El Pan de Pascua o Pain de Pâques es un pan dulce que se consume durante la Pascua en algunas regiones del sureste de Francia, como Provenza y la región de Niza. Está hecho con harina, huevos, leche, mantequilla, azúcar, pasas y cáscara de naranja confitada.

La forma del pan puede variar según la región, pero a menudo se hornea en forma redonda o de corona, y se decora con huevos de Pascua de colores o flores de azúcar. A veces también se puede espolvorear con azúcar en polvo.

La Procesión de la sangre se lleva a cabo en algunas partes de del sur de Francia, concretamente en Perpiñán. Esta procesión atrae cada año a miles de espectadores y representa el camino de Cristo con la cruz el Viernes Santo, día de su crucifixión. Desde la iglesia de Saint-Jacques salen alrededor de 700 penitentes con capirote negro y descalzos. La procesión dura casi tres horas en las calles del casco antiguo, pasando por la catedral de Saint-Jacques antes de volver a su punto de partida.

Esta procesión es la única que se lleva a cabo durante Semana Santa en toda Francia. Se trata de un acto con más de 500 años de antigüedad y una gran muestra de fe, en la que se conmemora el sacrificio de Cristo.

Os invitamos a todos a conocer las tradiciones que se viven por toda Francia durante la Pascua, así como a degustar los platos típicos que se preparan durante estas fechas tan especiales. ¡No os defraudará!