Exposición "Ángeles, Mariposas, Vagabundos / Anges, Papillons, Vagabonds". Evento organizado en el marco del festival LesGaiCineMad.
Inauguración el 29 de octubre a partir de 19:30h (reserva obligatoria)
Horarios normales de la exposición: lunes – viernes 12:00-20:00h
Tema
La exposición Ángeles, Mariposas y Vagabundos presenta una singular colección de retratos fotográficos de transeúntes en ciudades sudamericanas (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay, Venezuela).
Tanto los ángeles como las mariposas se refieren a aquellas personas de sexo femenino o masculino, o de ambos sexos a la vez, a menudo extravagantes, que juran lealtad a Eros. Los vagabundos constituyen esta familia de personajes marginales y coloridos que circulan libremente por el continente sudamericano, su territorio. Las tres categorías, ángeles, mariposas y vagabundos tienen en común esta forma de libertad y audacia, que a veces los acerca a las obras de arte. Esta exposición les rinde homenaje.
Todos estos retratos fueron recopilados durante un período de 12 años, entre 2006 y 2018.
Raphaël Blum
Raphaël Blum nació en 1966 en Forbach, Francia. Desde finales de los años 1990, tras numerosas estancias en América latina (Argentina, Bolivia, Paraguay) y en el sureste de Asia (Indonesia, Filipinas), desarrolló una obra multiforme de carácter antropológico en torno a la imagen del otro. La cuestión del exotismo siguió siendo un eje central de sus investigaciones. Realizó suites o colecciones de retratos de transeúntes en El sudeste asiático, en París y en las principales ciudades de América del Sur. Sus trabajos se realizan como un work in progress. Sus obras forman parte de las colecciones del MACS/Museo de Arte Contemporáneo de Sorocaba/Sao Paulo (Brasil), del Museo del Barro de Asunción (Paraguay), y del MUSEF, Museo Nacional de Etnografía y Folklore de La Paz (Bolivia).
“Ángeles, Mariposas y Vagabundos”por Fabio Magalhães
“Yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles
como pompas de jabón”
Cantares de Antonio Machado
Los personajes de Raphaël Blum son reales, están llenos de vida, de sensualidad y recorren las plazas y las calles de las ciudades del mundo entero. El fotógrafo viajero también pasea, sin meta definida, en busca de sus modelos, con los ojos bien abiertos, atentos al lenguaje corporal de los transeúntes, a su ropa colorida, a sus singularidades. De esta forma, su estudio ofrece una visión global.
Raphaël Blum recorrió Sudamérica en numerosas ocasiones siguiendo a sus personajes que escoge, uno a uno, entre la multitud. Sigue a paseantes anónimos por las calles de las grandes ciudades y de los pueblos, pero no los sorprende con su cámara fotográfica, al contrario, les pide que posen para sacarles un retrato y establece una relación directa, cara a cara, entre el fotógrafo y el retratado.
Los personajes proceden de diversos contextos urbanos – Asunción en Paraguay, La Paz en Bolivia, Buenos Aires, São Paulo, así como de las regiones de la Amazonia brasileña y del norte de Chile.
«Anges, Papillons et Vagabonds» reúne paneles con tres categorías urbanas distintas que Raphaël Blum llama: Les Anges, aquellos de sexo indefinido; Les Papillons, personajes que se presentan como mariposas, voladores; y les Vagabonds, que son unos tipos sorprendentes, marginales que recorren América Latina con ropa colorida, casi sacados de un circo.
En este magnífico fotoreportaje, Raphaël Blum inserta imágenes de esculturas, de paisajes y unos elementos decorativos para formar un mosaico sonoro, luminoso y profundamente humano.
Fabio Magalhães
Director del museo de arte contemporáneo de Sorocaba – SP Brasil
«Ángeles, Mariposas y Vagabundos» por Raphaël Blum
El mundo pertenece en primer lugar a los que lo ocupan y a los que lo recorren. Vivir es dejarse llevar por el movimiento del mundo, sin intentar poseerlo, es planear por encima del tiempo que fluye, bajar dejándose llevar por la corriente (Peer Gynt, Ibsen) y aceptar la existencia como un paso.
Durante mis andanzas por el mundo, he pensado a menudo el viaje como una metáfora de la existencia, como el gran viaje de la vida, hecho de descubrimientos y encuentros. América del Sur ha sido un
escenario propicio para esas experiencias. A lo largo de los itinerarios que solían empezar en Buenos Aires, para alcanzar Asunción en Paraguay, La Paz, São Paulo o Santiago de Chile, asociaba cada parada,
cada ciudad que cruzaba y donde pernoctaba, con la imagen de los demás. Esas travesías adquirían algún significado gracias a estos encuentros. Entre aquellos con los que me cruzaba y que quería asociar
a las diferentes paradas de mis peregrinaciones, varias categorías urbanas me llamaban la atención: los ángeles, las mariposas y los vagabundos.
En un continente de religión mayoritariamente cristiana, el ángel presenta a veces una cara inesperada. Que se desvele en la intimidad o se de a conocer públicamente, el ángel trata de borrar la frontera que separa los dos sexos. A menudo pertenece a ambos y promete lealtad a Eros. Aunque es común encontrarse con él después del anochecer, en la Plaza de la República de São Paulo, le gustan todos los lugares, como el territorio de Tánatos al que está vinculado.
Las mariposas también pertenecen a la esfera de Eros y del amor. Más bien femeninas, designan tanto a las que llevan la imagen en su piel como a las que encarnan las formas más diversas de la belleza. Las
mariposas suelen ser atrevidas, hasta quemarse las alas, como los ángeles. A veces, se atreven a desvelar en la sombra los tesoros que ocultan en sus cuerpos.
Tanto a los vagabundos como a las mariposas, les gusta circular, moverse de un sitio a otro, o deambular por el mismo territorio, sin rumbo. Visten distintas formas como esos personajes marginales y pintorescos que parecen haber sobrevivido a los tiempos. Mientras otros, con sus ropas o adornos inéditos, se inscriben directamente en el mundo contemporáneo como si fuesen los performers de una creación artística. Aquellas y aquellos que exploran el continente actuando aquí y allá como músicos o artistas callejeros suelen pertenecer a esa categoría urbana.
Ángeles, mariposas y vagabundos comparten este atrevimiento que les permite acceder a una forma de libertad que América ofrece. Pero su aparición en la escena urbana es a menudo un evento impredecible, que nos regalan como un espectáculo que compartir.
Raphaël Blum