La asociación cultural Q’ori Llaqta (palabra quechua que significa “pueblo de oro”) promueve la cultura peruana a través de talleres de cantos, danzas etc.

Jara / Barró se dedica al desarrollo personal y comunitario para personas en situación o riesgo de vulnerabilidad, marginación y/o exclusión social.

De la región de Madrid, de la sierra y de las vegas han venido:

Los Apisquillos, Puebla de la Sierra: Proyecto colectivo de cooperativa ganadera que mantiene rebaños de las razas autóctonas de oveja Rubia del Molar y cabra de Guadarrama, transformación láctea y un manejo agroecológico que mantiene este pueblo vivo.

La Caperuza, Busterviejo, recupera el pastoreo y produce quesos y yogures en su pequeña quesería.
Ambos proyectos han participado de la Escuela de Pastores de la Sierra Norte que ha lanzado campo adentro.

María Lapuente y Gabi Peris Ohrt, Vega de Chinchón: cultivan en regadío y de forma ecológica variedades locales de frutales y plantas aromáticas y medicinales—entre ellas, el lúpulo silvestre autóctono para abastecer a las cerveceras locales independientes.

El árbol del pan, Fresnedillas de la Oliva: Producen panes artesanos exclusivamente de masa madre con harinas ecológicas y locales.

Los Esparteros, Perales de Tajuña: Artesanos que recuperan usos de esta planta (Stipa Tenacissima) resistente a la sequía y que mantiene la humedad del suelo, ventajosa para recuperar fertilidad.

Asociación La Troje, El Berrueco: Reproducen y venden semillas olvidadas, recuperando y revalorizando con ello variedades locales y el saber agrario tradicional de la Sierra Norte de Madrid.

Por las ramas, El Escorial: Jabones y cosmética ecológica y hecha de forma artesanal que a la vez incorpora nuevos ingredientes como carbón, mica dorada, cannabis, entre otros.

Las Polish Fermentos plantean una línea de productos “vivos” buscando la participación en la producción de alimentos locales, una evolución en la incorporación de nuevos sabores, conocimiento sobre ciclos, ritmos y lenguaje relacionados con la fermentación y sus beneficios.

Campo adentro es una plataforma de colaboración que vincula territorio, cultura y cambio social. Publica libros, produce exposiciones o queso, hace de consultora para la Comisión Europea sobre el uso del arte en procesos de desarrollo rural al mismo tiempo que organiza un movimiento de pastores de oposición a la política agraria dominante. Está recuperando una aldea abandonada para la producción agraria y artística colectiva, donde junto al CAR (Centro de Acercamiento a lo Rural) en Madrid, y al espacio de uso intermitente en Mallorca, propone
la creación de comunidades-de-práctica como forma de arte post-contemporáneo.

El CAR es la sede en Madrid de campo adentro, un espacio abierto, dinámico e inclusivo en donde se busca el encuentro campo-ciudad volviendo visibles y catalizando procesos creativos y sociales en la ciudad. Es un espacio que combina la investigación, la formación y la
producción cultural a través de diferentes líneas de acción, desde un
Centro de Documentación a una Cantina o Taller de Autoedición.

Entrada libre. Pago de los productos con efectivos únicamente.

Noche de las Ideas en toda España